El 18 de mayo, se celebra el Día Internacional de los Museos. Una conmemoración cuyo objetivo es destacar su protagonismo en la preservación y promoción de la cultura y el arte. Esta efeméride fue establecida por el Consejo Internacional de Museos (ICOM) en 1977, con el propósito de concienciar sobre su importante labor en el desarrollo de las sociedades. Cada año, se elige un contenido específico que guía las actividades y que varía, reflejando los desafíos y preocupaciones que encara la comunidad museística.

La celebración del Día Internacional de los Museos se ha convertido en un acontecimiento global que involucra a miles de colecciones en más de ciento cincuenta países. Los museos aprovechan esta oportunidad para organizar una amplia programación, que va desde exposiciones y conferencias hasta visitas guiadas, talleres interactivos y conciertos. Estas iniciativas buscan atraer a un público lo más amplio posible, incluyendo a personas de todas las edades y niveles educativos.

Uno de sus objetivos principales es difundir la herencia cultural y artística, por este motivo diversas colecciones ofrecen entrada gratuita o descuentos especiales. Además, se han adoptado enfoques más participativos, creando programas educativos y actividades diseñadas específicamente para personas con discapacidades o grupos desfavorecidos.

El Día Internacional de los Museos también fomenta la colaboración a nivel internacional. Las instituciones participantes suelen establecer alianzas facilitando el intercambio de exposiciones, investigaciones conjuntas y programas educativos. Esta colaboración transfronteriza fortalece los lazos culturales entre países y contribuye a una comprensión más amplia y profunda de la diversidad cultural. Uno de los avances más reseñables de los últimos tiempos es la incorporación de los museos al ámbito digital. La incorporación de la tecnología y las plataformas en línea han ampliado su alcance y nos permiten acceder a sus colecciones de una manera fácil y amena. Se han creado recorridos virtuales, donde los visitantes pueden explorar las galerías y ver las obras en alta resolución, además, se han desarrollado aplicaciones móviles que brindan información adicional sobre determinadas piezas y permiten a los visitantes profundizar en su conocimiento y análisis.

Las redes sociales constituyen una herramienta fundamental, ya que posibilitan conectar de manera instantánea. A través de plataformas como Instagram, Facebook y Twitter, los museos comparten imágenes, videos, entrevistas y actividades interactivas. Esto fomenta la participación activa de los seguidores, quienes pueden comentar, compartir y hacer preguntas.

La digitalización de los museos ha demostrado ser una forma efectiva de involucrar a nuevas audiencias, especialmente a los jóvenes, que están acostumbrados a interactuar en línea y tienen un acceso más limitado a las visitas físicas. Los museos han aprovechado esta oportunidad para crear contenido educativo atractivo y entretenido, como videos, juegos e incluso desafíos artísticos. Sin embargo, es importante destacar que, si bien la tecnología y las plataformas nos ofrecen nuevas oportunidades para difundir la cultura, no reemplazan la experiencia personal e íntima de la contemplación directa. Una experiencia cada vez más necesaria en un mundo que parece querer prescindir de la belleza, pero como dijo Oscar Wilde: “El arte no es algo que se pueda tomar y dejar. Es necesario para vivir.”