Durante el reinado de Carlos III (1759-1788) se llevó a cabo una gran labor de mecenazgo en cuanto a las letras y las artes. España era un país atrasado frente a otras naciones europeas y el gobierno trató de mejorar el urbanismo y las infrestructuras públicas. Son muchas las obras e iniciativas llevadas a cabo en esos tiempos que han llegado hasta nosotros, pero uno de nuestros grandes nexos de unión como compatriotas es el símbolo de España. La bandera fue adoptada mediente Real Decreto el 28 de mayo de 1785. En un primer momento se destinó a los buques de guerra pero progresivamente fue desplegada en edificios militares y públicos. La Constitución de 1978 refrendó su diseño en su artículo 4. He aquí el decreto de adopción de la Bandera de España firmado por Carlos III en el Palacio Real de Aranjuez:
“Para evitar los inconvenientes, y perjuicios, que ha hecho ver la experiencia puede ocasionar la Bandera Nacional, de que usa mi Armada naval, y demás Embarcaciones Españolas, equivocándose a largas distancias, o con vientos calmosos, con las de otras Naciones; he resuelto, que en adelante usen mis Buques de guerra de Bandera dividida a lo largo en tres listas, de las que la alta, y la baxa sean encarnadas, y del ancho cada una de la quarta parte del total, y la de en medio amarilla, colocándose en ésta el Escudo de mis Reales Armas reducido a dos quarteles de Castilla y León con la Corona Real encima; y el Gallardete con las mismas tres listas, y el Escudo a lo largo, sobre Quadrado amarillo en la parte superior: Y que las demás Embarcaciones usen, sin Escudo, los mismos colores, debiendo ser la lista de en medio amarilla, y del ancho de la tercera parte de la bandera, y cada una de las restantes partes dividida en dos listas iguales encarnada, y amarilla alternativamente, todo con arreglo al adjunto diseño. No podrá usarse de otros Pavellones en los Mares del Norte por lo respectivo a Europa hasta el paralelo de Tenerife en el Océano, y en el Mediterráneo desde primero del año de mil setecientos ochenta y seis: en la América Septentrional desde principio de Julio siguiente: y en los demás Mares desde primero del año de mil setecientos ochenta y siete. Tendréislo entendido para su cumplimiento—Señalad de mano de S. M. en Aranjuez a veinte y ocho de Mayo de mil setecientos ochente y cinco”
Ea…… pa que después se hable sin sabé!
Exactamente May.